Cuando el novio de Sadie (Malone Thomas) cancela sus planes de vacaciones, ella decide pasar la Navidad con sus padres en su ciudad natal, solo para descubrir que han vendido la querida tienda de chocolate de la familia a un extraño que no sabe nada sobre chocolate. A regañadientes, su padre la convence de que ella sería la opción obvia para ayudar a enseñarle al nuevo propietario todo lo que sabe sobre el chocolate. Mientras planea la fiesta de jubilación perfecta para sus padres, descubre que
